Produção, extração e armazenamento do sêmen do camarão de água doce Macrobrachium acanthurus

Abstract

Presente en todo continente americano, en los ríos de agua dulce y reproduciéndose cerca de las desembocaduras, en virtud de su dependencia de la salinidad para la reproducción, el langostino Macrobrachium acanthurus es consumido por poblaciones tradicionales, que mediante prácticas extractivas lo capturan en sus diferentes fases del desarrollo. Este langostino presenta dimorfismo sexual, siendo los machos mayores que las hembras. En éstos, los espermatozoides son producidos en los testículos y reciben sustancias nutricionales a lo largo del vaso deferente donde son empaquetados en un espermatóforo que puede ser extraído directamente de la ampolla terminal. El proceso de criopreservación de especies nativas, tanto para proteger el patrimonio genético o estimular una mayor producción animal mediante los procesos de inseminación artificial, ha sido utilizado en varios organismos acuáticos. En camarones, esta biotecnología no ha sido empleada con suceso hasta ahora, aunque la mayoría ha sido empleada a especies marinas. De esta forma, este trabajo tuvo como objetivo iniciar los estudios en esta especie nativa y diferente de otras investigaciones, no desarrollar un protocolo de congelamiento, sino viabilizar prácticas para que en el futuro se logre el suceso obtenido en otros organismos de cultivo. Para esto, se realizaron tres estudios, donde en el primero se identificó la mejor voltaje (6,0 Voltios) que permitió la extracción del espermatóforo sin causar daños ni al semen y ni a los animales, así como la talla (18,0 mm de largo del caparazón) y peso (5,0 g peso vivo) con que estos animales podrían contribuir con producción espermática máxima. El segundo estudio se realizó para obtener una dieta que mejorase la producción de espermatozoides, sin comprometer su calidad para la criopreservación. De las dietas probadas, una mezcla entre alimento fresco, compuesto de músculo de pescado y calamar, y un alimento seco, con un total de 30% de proteína cruda, fue el recomendado, justificado por el bajo impacto proporcionado en la constitución del espermatóforo; sin embargo se necesitan más investigaciones en esto aspecto. El tercero experimento fue dividido en tres partes, habiéndose realizado una prueba de toxicidad, donde el metanol 10% y el glicerol 10 y 20% con un tiempo de equilibrio de 10 minutos se presentaron como los menos tóxicos para el material seminal, siendo utilizados en cuatro pruebas de congelamiento; dos pruebas fueron hechas en un equipo comercial (automatizado) y otras dos con un método convencional de congelamiento. El mejor resultado (21,83% de supervivencia) fue obtenido con el método convencional, con glicerol 10%. En la tercera parte se realizó una prueba de supervivencia espermática con el uso de agua destilada por 10 días, siendo el material refrigerado a 5°C. Los resultados revelaron que los espermatozoides se mantienen viables hasta tres días, pudiendo utilizarse para la fecundación.